¿Qué es la gestión de activos?
Una gestión eficaz de los activos consiste, en última instancia, en priorizar los escasos recursos disponibles para gestionar sus activos en función de una serie de objetivos, entre los que se incluyen las metas medioambientales, los factores operativos y la planificación rentable del capital.
El software proporciona los medios para alcanzar estos objetivos con herramientas para gestionar los datos, el cumplimiento y cualquier trabajo en sus activos o infraestructuras. Para los sectores regulados y con un uso intensivo de activos, a menudo con una plantilla envejecida, la implantación de una plataforma de software completa e intuitiva es cada vez más crítica.
El factor de mayor éxito a la hora de implantar un software de gestión de activos es su capacidad para captar datos significativos sobre los activos: temperatura, estado, presión, historial de trabajo y otras variables calculadas que informarán sobre el nivel de riesgo de un activo concreto.
Los datos deben recopilarse a partir de diversas entradas, como resultados de laboratorio, SCADA, formularios de inspección y GIS y, posteriormente, estos datos deben analizarse para que los operadores puedan priorizar las acciones diarias.
Muchas empresas ya utilizan un sistema informatizado de gestión del mantenimiento (GMAO) o un sistema de gestión de órdenes de trabajo. Sin embargo, estos sistemas suelen ser muy específicos, ya que ayudan al personal de mantenimiento a completar el trabajo en los activos según lo definido por un programa o una condición individual.
Sin embargo, un enfoque global de gestión de activos dará cabida a un análisis exhaustivo de los datos de la empresa para ayudar a determinar qué trabajos deben realizarse y cuándo.